Biografía de Catalina Von Bora: la ayuda idónea de Lutero

Biografía de Catalina Von Bora: la ayuda idónea de Lutero"¡...Si sólo supieran qué buena cosa fue estar junto a un bello marido, y cuán aceptable es para Dios! ¡Durante mucho tiempo yo viví en esas sombras e hipocresía en la que ustedes siguen todavía! Pero Dios solo me hizo reconocer el sin sentido de mi desgraciada vida, y fui guiada a la luz de la verdad. Considerando arrepentida cómo vivía, pues en esas órdenes no hay otra cosa que santurronería, corrupción mental y ocio, ... tome unos quinientos ducados del tesoro de la abadía, y abandoné esa realidad desgraciada. Y gracias a Dios ya tengo cinco hermosos niños y vivo de manera saludable." (Marie Dentière, ex abadesa fugada del convento de Tournai)

Catalina Von Bora nació el 29-1-1499 en el pequeño
establecimiento rural de Lippendorf. En 1505, la pequeña Catalina era pupila en el
convento de monjas agustinas en Brehna. En 1508/09 ingresó al convento de monjas cistercienses Marienthron, en Nimbschen, cerca de Grimma. Allí comenzó su noviciado en 1514, después de haber completado su educación básica que también incluyó nociones de latín . Un año después fue consagrada monja e hizo votos de pobreza, obediencia y castidad. El convento cisterciense de Nimbschen era una factoría rural de considerables proporciones. Esto permite suponer qué Catalina, además de su formación religiosa, pudo haber conocido aspectos y tareas vinculadas a los múltiples quehaceres económicos del establecimiento.

En abril de 1523 Catalina se fuga del convento. Durante dos años asistió a Bárbara Brengebier (esposa del célebre artista Lucas Cranach) en la gran casa-taller del matrimonio en Wittenberg. Esto le permitió conocer el tejido social dentro de esa pequeña ciudad universitaria , además de seguir completando sus habilidades de manejo y administración doméstica. En septiembre de 1524 Catalina desestimó la propuesta de contraer matrimonio con Caspar Glatz, ex rector de la universidad y flamante sucesor de Carlstadt como párroco en Orlamünde (Turingia). Catalina comentó su decisión con Nicolás von Amsdorf (colega y amigo de Lutero), y le pidió que influyera en Lutero para que no la desposara con Glatz contra la voluntad de ella. Pero además le manifestó, que si él mismo o Lutero la querían tomar como esposa, ella no se iba a negar.

Hacia comienzos de 1525 la situación se había vuelto cada vez más compleja para Lutero y el movimiento de reforma que encabezaba. En varios frentes se producía una agudización de conflictos. La toma de distancia de Martín Lutero respecto al ideal medieval de la vida monástica (y célibe, lo ocupó intensamente a partir de 1520. Pero el reformador selló definitivamente su ruptura con el antiguo estilo de vida religiosa cuando, el 13-6-1525, él y Catalina decidieron casarse. Mediante ese acto público, él -como ya antes lo habían hecho otros protagonistas del movimiento de Reforma evangélico manifestó visiblemente su convicción teológica de que no se debía seguir sosteniendo la distinción entre personas religiosas y personas laicas. En cierto modo, el casamiento y la subsiguiente vida familiar de los clérigos fue la otra cara del sacerdocio común de todos los creyentes. Mediante su casamiento, los sacerdotes que adherían a la Reforma se convertían en laicos y disolvían la tajante separación (característica de la sociedad medieval) entre un ámbito de vida profano y otro sagrado. Terminaba así la distinción elitista entre una vida consagrada a Dios (supuestamente superior) y una vida común orientada hacia el mundo (de menor valor religioso).

Una vez casados, los esposos Lutero se establecieron en el monasterio de los agustinos en Wittenberg, que les fue cedido como vivienda por el príncipe elector Juan.
Catalina se encargó de administrar el dinero y los recursos. Además reacondicionó el huerto del monasterio, y cultivaba hortalizas y frutales. Y desde fines de los años '20 comenzó a tomar estudiantes de la universidad como pensionistas. Esta modalidad pragmática y emprendedora de Catalina, quedó esbozada en la propuesta que en 1535 le hizo su esposo: si ella se dedicaba con regularidad a leer la Biblia, él la recompensaría con 50 Gulden.
Catalina formó parte de la primera generación de esposas de pastores protestantes, que junto a sus maridos compartieron la lucha por la fe. Falleció 20-12-1552. El día siguiente, con la presencia de los estudiantes y colegas de su esposo, fue sepultada en la iglesia parroquial de Torgau, donde una lápida hermosamente tallada recuerda su figura de cuerpo entero.


Zorzin, Alejandro Publication: Cuadernos de Teología
Epictura

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